El mercado de los tablet PCs, ordenadores portátiles táctiles desprovistos de teclado, sufrirá en noviembre una revolución. Alejado de los altos precios acostumbrados en estos dispositivos, CrunchPad costará 300 dólares con un diseño elegante y estilizado. Es la era de lo portátil, de la conexión a Internet móvil, de la reproducción de vídeos on-line y de las redes sociales ubicuas. Un marco incomparable para los tablet PCs: ordenadores táctiles, ligeros, delgados y, potencialmente, siempre conectados.
CrunchPad se estrenó con un prototipo algo tosco de plástico pero el modelo definitivo mostrado por Arrington este verano incorpora aluminio y un diseño más estilizado. Tiene 18 milímetros de grosor, tan sólo 1,2 kilos de peso y una pantalla táctil panorámica de 12 pulgadas. En cuanto a la potencia del ordenador, estará en una línea parecida a los netbooks tan populares hoy en día: un procesador Intel Atom de 1,6 Ghz y 1 GB de Ram. Se ha confirmado que se conectará a Internet vía Wi-fi y está por ver si también sumará 3G. En cuanto al sistema operativo, Arrington confirmó que funcionará con Linux. CrunchPad llegará a Estados Unidos en noviembre y lo más llamativo será su precio: 300 dólares, muy por debajo de lo acostumbrado en este tipo de dispositivos.